Pistas borgoñonas XXX

Las pistas de este mes las voy a centrar en vinos de Pierre Bourée, dejando otras referencias probadas para las Pistas del mes de Junio. El motivo ha sido la visita de Jean-Christophe Vallet a España y la buena sesión de vinos que hemos podido probar con él. No cabe duda de que tengo un especial aprecio a este oasis de Pinot Noir clásico que es esta bodega, ya que fue la primera que empezamos a importar desde Borgoña. Siempre el trato ha sido exquisito y la impresión que se ha llevado Monsieur Vallet ha sido magnífica.

Sigue estando delicioso pero aún algo primario su Bourgogne Rouge 2010 procedente de viñas en Gevrey-Chambertin, Brochon y algo en Fixin y Marsannay. La añda me gusta en toda esta zona norte de la Côte de Nuits y es un punto de partida perfecto para conocer los vinos de esta bodega.

Su Fixin «La Croix Blanche» 2010 muestra un perfil más potente, con mucha más fruta negra, restos de ceniza, tierra y un toque ahumado sutil. La boca es más potente, más rústica y es un vino que en esta añada muestra un perfil más clásico que en sus anteriores 2009 y 2008. Rico.

El Pernand-Vergelesses Blanc 2011 va subiendo y subiendo en calidad. Por fin han conseguido comprar el viñedo de donde sale y el trabajo desarrollado se ha ido superando poco a poco. Un vino complejo, amplio, y que sorprendió a mucha gente en la degustación realizada. Siempre he pensado que en esta zona se va a asentar un gran futuro de vinos blancos borgoñones así que veremos su evolución a lo largo de los años próximos.

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Abrir una botella del Bourgogne Rouge 2008 y ver qué bien se conserva nos vuelve a ilusionar con los vinos de esta difícil pero interesante añada. El Gevrey-Chambertin 1erCru «Champeaux» 2002 muestra una austeridad que me gusta. Añada fácil de beber, no esperen un vino potente pero sí disfruten de la complejidad que nos ofrece la localización de la parcela. Sutil, elegante y con cierto toque etéreo que invita a nadar en la copa.

El Gevrey-Chambertin 1997 no engaña. Tanino mucho más duro, potencia contenida, cierta rusticidad y toque cárnico que invita a la paciencia. Muy bueno el Gevrey-Chambertin 1erCru «Cazetiers» 1982. Añada difícil, con bastantes lluvias y calor final pero los viñedos más fríos parece ser que se conservan mejor (lástima de un, para mí, oxidado Mazys-Chambertin Grand Cru 1982) y este vino con más de 30 años a su espalda así lo demuestra.

El Chambertin Grand Cru 2001 volvió a darnos momentos de enorme placer. Nos gusta la añada, nos gusta ese perfil un tanto animal que aún preserva el vino, nos gusta su profundidad, ¡nos gusta todo!

Terminamos con una sesión en torno a vinos del 2008: Gevrey-Chambertin, Gevrey-Chambertin «Clos de la Justice», Gevrey-Chambertin 1erCru «Champeaux», Gevrey-Chambertin 1erCru Cazetiers y Chambertin Grand Cru. Una excelente representación de viñedos situados en Gevrey-Chambertin en una añada interesante y que era como estar en una escalera…cada vino daba un pasito sobre el anterior. Eso sí, el Chambertin está aún en pañales pero apunta momentos gloriosos.

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Un saludo

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